lunes, 13 de julio de 2009

Breakfast "La morena"

¿Cuántos tacos de birria quieres? Ni uno, no quiero nada.
-Tienes que comer andale.
Le decía una madre a su hijo, mientras este con los ojos llorosos evadía el rostro de su padrastro.
¿Cómo me enteré de que ese hombre alto de camiseta American Eagle era su padrastro? Pues yo estaba en mi segundo taco de birria cuando el niño gritó que no era su papá, no comprendí porque lo gritó, pero era una necesidad probablemente de hacer culpable a la madre y de hacer complice al padrastro.
Mientras la madre de senos decubiertos se sintió avergonzada, miró a su hijo con unos ojos de enojo, y agacho la mirada. Ya no le pidió que comiera si no que se subiera a la camioneta del padrastro y asi fue.
¿Porqué sé todo? ¿Pensarán que estuve de boba observando a cada uno de estos individuos? Pero no, transcurrió en 2 o 3 minutos para darme cuenta que él niño simplemente no quería compartir ni a su madre, ni su desayuno con un extraño.
Apenas me acabe el segundo taco de birria y ya tengo una historia callejera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario